miércoles, 5 de noviembre de 2014

LA BALLENA QUE QUERÍA VOLAR Y LO HIZO

Ayer entre que esperábamos que llegara del ansiado pastel, el Duende y yo nos entretuvimos reciclando las bateas de los vómitos. Son una especie de cuencos grises fabricados con cartón reciclado. Sirven para vomitar en ellos (obviamente) y también las enfermeras los usan para transportar todos los materiales que necesitan para las curas o para traernos la medicación. Vamos...es un cuenco feo.

Nosotros decidimos construir unos barcos preciosos para los playmobils; los pintamos y decoramos para terminar jugando con ellos imaginándonos que las sábanas de la cama del peque eran un mar grandioso. Fue en medio de ese juego cuando se me ocurrió el cuento que viene a continuación y claro, no pude evitar contárselo primero al Duende y al ver que le gustaba decidí escribirlo e ilustrarlo para mostrarlo aquí.
Si tiene o no moraleja es algo que aún no he pensado pero en mi opinión refleja lo que todos ya sabemos: LO IMPOSIBLE ES POSIBLE SI CREEMOS QUE LO ES.
Seguro que alguna mente más freudiana que la mía le saca más jugo.

FELIZ DÍA
*Si quieres ver los barcos puedes hacerlo en nuestra página de facebook

7 comentarios :

  1. Yo voy a decirte mi lectura dl cuento...mas q decir q lo imposible s puede cnseguir yo diria q cuando anhelamos algo muxo mucho aunque no lo cnsigamos encontramos algo "parecido" q ns ace igual d felices...es dcir ella volar no podia ni iba a poder x eso ese salto q duro segundos le parecieron tan satisfactorios como si hubiese cruzado medio pais volando.Lo importante a veces no es cnseguir lo imposible si no ser feliz cn lo q podamos hacer....y dspues d ste rollo voy a ver tu fcbook y ver esos barquitos...bsos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ves??? Si ya lo decía yo, una mente más analítica daría con una conclusión millones de veces mejor que la mía. Tienes toda la razón, ESO es lo que este cuento significa.
      ¡¡GRACIAS!!

      Eliminar
  2. Yo le cuento muchos cuentos como ese ami peque antes de dormir, ayer le tocó al ratoncito Chiquitín, pero consiguió ser mas rápido q su hermano al llegar al río porque conocía un atajo. El se lo pasa pipa viendo como imito a los animales y yo disfrutando con sus risas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues si algún día quieres que te los ilustre ya sabes que estaré encantada.
      Ya me has dejado con las ganas de saber que le pasaba a ese ratoncito Chiquitín.

      Eliminar
  3. Que grande eres Carola!!
    Que no se puede conseguir deseándolo de corazón? Si lo deseamos mucho y aprovechamos ese impulso... todo puede ser.
    Muacks!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ademásd e verdad. O bien nos impulsamos solos o bien le pedimos ayuda a alguien.
      TODO ES POSIBLE

      Eliminar
  4. Estoy deseando ver todos tus juntos juntos en un libro. Me lo dedicarás ¿no?

    ResponderEliminar

Gracias por tus blablablas