viernes, 17 de abril de 2015

EQUILIBRIOS

Sé que no estoy escribiendo mucho últimamente pero ésto no significa que me haya olvidado del blog. No, de eso nada, la verdad es que lo tengo muy presente pero desde que hemos vuelto a casa he decidido dedicar el tiempo un poco a mi, a fortalecerme, a cuidarme y sobre todo a aprender a equilibrarme.

Estoy harta de vivir como si caminara sobre una cuerda floja donde, si me caigo, no me espera ninguna red sino un montón de monstruos hambrientos, un mar de lava y vete tú a saber qué más espantos.

Pero como esto no lo puedo evitar porque mi vida es así sí o sí, no me queda otra que amoldarme...

No lo he contado antes por aquí porque no quería asustar a nadie pero tengo que confesar que justo el día antes de mudarnos de nuevo a Cartagena mi cuerpo me dio un aviso. Un aviso importante, uno que me asustó de verdad y no sólo a mi sino también a Papá.

Siempre que me preguntan cómo me encuentro y cómo llevo la enfermedad del peque yo digo que bien y no es que mienta, lo digo porque así lo siento. Por supuesto no estoy para tirar cohetes pero, aunque no me canse de repetirlo, si Daniel está bien, y lo está, yo también lo estoy.
No lloro, no me lamento ni me compadezco de mi misma, simplemente asumo el papel que me ha tocado. Sí, tal vez me contenga más de la cuenta pero creo que estoy tan acostumbrada a hacerlo que ya ni percibo que lo hago.

Lo que me pasó aquel día al que he hecho mención antes es que, aunque mi mente quería seguir adelante mi cuerpo dijo basta. Me fui. En mi cabeza estalló un dolor tan enorme que se me quedó medio cuerpo paralizado y esto va en serio, se me durmió la cara, el brazo, la mano...Por si fuera poco no era capaz de hablar ni expresar lo que quería decir. Pero ya digo que fue mi cuerpo porque mi mente seguía empeñada en hacer todos los recados necesarios que nos permitieran ultimar los detalles para poder volver a casa. Y sin pensar metí al peque en el coche y conduje durante media hora, (el tiempo de distancia que hay entre la mini casa que teníamos alquilada y la casa de mi prima, para poder devolverle todas las cosas que nos había prestado). Ahora lo pienso y se me ponen los pelos de punta, ¡¡qué inconsciente!! ¡Podía habernos pasado algo!
Imagínate la cara de mi prima cuando abrió la puerta y me vio, según ella, pálida y con cara de ida, soltando incoherencias por la boca, mientras el niño dormía tranquilamente en el coche.

Ese día se suponía que volvíamos a casa pero no pudo ser, tuve que pasarlo en cama, durmiendo, relajándome, permitiendo a mi ser que se tomara unas vacaciones.

Así que, para evitar estos males tomé la determinación de dedicarme tiempo a mi. Porque para poder cuidar de Daniel tengo que estar bien y ya no basta con no ponerme enferma, tengo que estar bien en todos los sentidos, física, mental y espiritualmente.

Lo primero que hice fue algo que llevaba tiempo queriendo. Me apunté a tiro con arco. Sí, soy una friki pero ahora soy una friki feliz.

Me gusta la sensación de sostener el arco, sentir su peso sobre mi mano izquierda. Adoro colocar la flecha y tirar de la cuerda, el autocontrol, la presión, toda esa potencia entre mis dedos.  Respirar profundamente y soltar. Entonces la flecha vuela a una velocidad que mis ojos no alcanzan, a la vez que el sonido rompe el aire como si cantase. Y por fin,llega el impacto y se clava en la diana.
No soy muy buena, no suelo dar mucho en el centro, aunque sí lo he conseguido. Pero no es la puntería lo que me gusta, es todo lo demás, el ritual, la preparación...el poder tener el control de algo en mi vida, por insignificante que sea.

También, por recomendación de una amiga, me apunté a yoga.

Voy a clase con los dientes apretados, porque así estoy todo el día, incluso ahora mientras escribo, tengo los dientes apretados y me duelen las mandíbulas... pero me aguanto. 
Sin embargo allí no los aprieto, me relajo, de algún modo me libero y suelto momentáneamente la carga que me acompaña siempre.
Realizo los ejercicios dándome cuenta de lo chungo que tengo el cuerpo, me estoy haciendo mayor, ¿cómo me he podido dejar tanto? Si es que no tengo flexibilidad estoy hecha una birria.

Lo que más me gusta del yoga, a parte de la relajación y demás, es cuando cantamos los mantras. Como son en indú no tengo ni idea de lo que digo pero, bah, ¡qué más da!, suenan genial.
La vibración se me mete por dentro y me sube a las nubes. Encima, cada día realizamos un Kriya diferente y a veces esos Kriyas son para enviar energía, para dar fuerza a quienes la necesitan y yo me siento todavía mejor pensando mentalmente en todos los peques de la Paz, enviándoles esa fuerza que necesitan...

Además del yoga y del tiro con arco también estoy dedicando mucho tiempo a hacer otra cosa que me gusta...escribir.
Llevo unos cuantos años haciéndolo pero desde hace poco lo hago con más ganas. Quizás algún día estas historias que me invento vean la luz pero por ahora me contento con escribir para mi y para los pocos que tienen la osadía de aguantar mis fantasías.

En fin, que me siento bien. Puede que siga caminando sobre esa cuerda pero ya no me caigo, voy en equilibrio.


A la vez que yo ocupo las horas del día (que se me quedan cortas) el Duende también lo hace siendo, como debe ser, un niño feliz: disfrutando con su profe, aprendiendo a escribir y a leer. ¡¡Ya escribe su nombre estupendamente!! Además juega muchísimo con sus dos mejores amigas, monta en bici, come muchas chuches y se ríe un montón.

Y nada, esto es lo que quería contarte, que estamos bien, que todo sigue hacia adelante y que estoy deseando que haga mejor tiempo porque tengo los pies fríos.

También quiero decirte que te quieras y que hagas lo que te apetezca aunque tengas que sacar el tiempo de debajo de las piedras

FELIZ DÍA, SEMANA, MES...

10 comentarios :

  1. Carola, ahora eres una guerrera con arco, menudo peligro!!! quería decirte que sí, que te tienes que cuidar, no nos preocupamos de nosotras y es muy importante nuestra salud física y mental para poder seguir cuidando de los nuestros y de nosotras mismas.Me alegro tanto de que estéis bien..... Sigo vuestra historia desde el día uno, es como una montaña rusa, a veces triste, a veces mararivosa, otras apasionante.....con sus pros y sus contras, me encanta. He tardado en hacerlo, pero ayer me hice oficialmente donante de médula, ojalá haya alguien a quien pueda ayudar. Muchos besos, valientes.

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  2. Vaya susto, preciosa! A mi me ha pasado algo también. No es como lo tuyo pero fue que nos dijeran que Javi está en remisión y empezar a encontrarme mal yo. En plan mareos, taquicardias (mis pulsaciones en reposo llegan a alcanzar las 120 pulsaciones) pero me han hecho mil pruebas y ha salido todo bien. El médico dice que la presión que he ido cogiendo la he soltado ahora y me afecta a los nervios. Pero no lo puedo controlar. Quiero decir, yo no me siento nerviosa pero ahí están las pruebas que indican lo contrario.
    Es verdad que tenemos que cuidarnos, a mi me dijeron que mi vida no podía ser cuidar de él 24 horas, que necesitaba mi espacio, salir, despejarme... pero si a mi se me hacía imposible imagino que cuando el afectado es tu propio hijo aun lo es más.
    Pero hay que intentarlo, cuidarse digo. Para poder seguir cuidándole a él. Yo me alegro muy mucho de que las cosas os estén yendo bien.
    Besitos y achuchones para el Duende y para la bonita de su mami!

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  3. El cuerpo siempre termina pasando factura... esta bueno que hayas tomado este aviso en serio y hayas empezado a dedicarte tambien ese espacio para liberar tensiones y estar bien. Lo de tiro con arco me parece gracioso, si a vos te sirve fantastico.. el yoga siempre es recomendable y hace muy bien. Tambien me gusta cantar mantras!! de hecho, creo que algunos me han salvado en mas que una ocasión.
    Te paso una lista de algunos que me gustan especialmente, por si no los conoces:

    Adi Shakti (Snatam Kaur)
    https://www.youtube.com/watch?v=vtn-c6nPjE4

    On namo narayanaya (Deva Premal)
    http://letras.mus.br/deva-premal/1232550/?domain_redirect=1

    Ek Ong Kar Satgur Pras
    https://www.youtube.com/watch?v=B2XkzZR4R0U

    Beso

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  4. Hola Carol, te echaba de menos en tu blog, me alegro de volver a leerte y como siempre interesante y lleno de fuerza. un abrazo muy fuerte

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  5. Uff, se me han puesto los pelos de punta, pero cuando he leído lo del tiro con arco, casi me meo de la risa, y no porque me ría de ti, sino por todo lo contrario!!! Porque yo tb soy una friki del tiro con arco, o lo era, porque hace varios años que no lo practico, pero me encantaban las mismas sensaciones q a ti, la concentración para tensar y apuntar, el tiempo que pasaba en en pabellón de tiro, era como si estuviera a mil kilómetros.
    Ojala, ahora q estáis en casa y q el Duende esta recuperando su "normalidad", puedas recuperarse al 100%, porque ese susto, fue una advertencia!!!
    Un beso muy grande para el duende y para la súper mamá del duende.

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  6. Madre mía, Carola. Te estaba leyendo y parecía que lo que escribías eran mis propias palabras. Me has dado qué pensar, y mucho. Creo que voy a tener que aplicarme el cuento y aprender a escuchar a mi yo interior.
    Por otro lado, me alegro de que todos estéis bien y que la vida, poco a poco, se esté normalizando.

    Un saludo y a seguir creciendo!!

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  7. Carola estoy llorando...no se si de pena X lo Q has contado o de alegría X saber Q ya estas bien. ..si viviéramos más cerca me iría ahora mismo a tomarme un kfe contigo y te diría Q ya te llegó el día. ..una vez te lo dije..no recuerdo bien como fueron las palabras...se Q te recomendé irte a la discoteca o d tiendas, algo "para ti" es ....a sido tiro al arco pues genial...el cuerpo es sabio y nos da avisos. ..así Q exa el freno y toma conciencia de todo lo Q habéis vivido...desde aquí te mando un beso fuertisino. ..

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  8. qué susto! cuídate mucho y espero que algún día publiques tus escritos! ^^

    (lo del tiro al arco es una pasada, mi dentista era pro! xD)

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  9. Me encanta leer tu blog. Me gusta mucho cómo te expresas y cómo transmites. Y me encanta leer que el duende esté tan bien!
    Laura Maq

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Gracias por tus blablablas