Las Frutas Amigas

Ya hace que conté, muy por encima, que el Duende tiene unas cuantas restricciones alimentarias que me han ocasionado más de un quebradero de cabeza a la hora de organizar sus comidas o más que las comidas las entrehoras y los picoteos.

Porque, antes de que se me olvide, los alimentos que tiene estrictamente prohibidos son todos los lácteos y demás subproductos que no estén pasteurizados y también las carnes, los pescados, las frutas, las verduras y los frutos secos que no estén bien cocinados con la excepción de las frutas con piel gruesísima que si se las puede comer cruditas como su planta las trajo al mundo.
El motivo no es otro que evitar riesgos innecesarios tales como enfermedades asociadas a estos alimentos.

Pero bueno, lo de los quebraderos de cabeza era antes de ponerme super seria y declararle la guerra a las guarrerías extra-azucaradas.

Ahora lo llevo muchísimo mejor y más todavía con las ricas frutas que la estación estival trae consigo y que están totalmente dentro de la lista de lo permitido.

Por eso hoy quiero dedicarle este post a esas frutas maravillosas que sí puede tomar el Duende y que llenan su barriguita cuando antes o después de las comidas le da hambre (cosa ahora mismo súper normal por culpa de los corticoides que lo han convertido en una máquina de devorar)

ÑAM ÑAM....deliciosas, dulces y fresquitas.